Reseña: Halo, Alexandra Adornetto

Título: Halo
Autor: Alexandra Adornetto
Lugar de publicación: Barcelona
Editorial: Roca Editorial
Año: 2010
Páginas: 407


Saboreando el comienzo:

" Nuestra llegada no salió del todo según lo planeado. Recuerdo que aterrizamos casi al alba, porque las farolas todavía estaban encendidas. Teníamos la esperanza de que nuestro descenso pasara inadvertido y así fue en gran parte, con una sola excepción: un chico de trece años que hacía su ronda de reparto justo en aquel momento."

En la contraportada:

" La llegada inesperada de los hermanos Church, Gabriel, Ivy y Bethany, supone un revuelo en la pequeña población de Venus Cove. Son extremadamente bellos, inteligentes y misteriosos. ¿De dónde vienen?¿Dónde están sus padres y por qué sobresalen sea la que sea la actividad que emprenden? Los tres son en realidad ángeles con la misión de salvar al mundo de su inminente destrucción. Tienen instrucciones claras: no deben establecer vínculos demasiado fuertes con ningún humano y deben esforzarse en ocultar sus cualidades sobrehumanas. Pero Beth, la más inexperta, rompe las reglas sagradas: se enamora de Xavier Woods, el chico más guapo del colegio. Desafiar al cielo no resulta una buena idea cuando debes enfrentarte a las fuerzas del mal..."

Mi opinión:

Cuando empecé a leer este libro, ya tenía una idea más o menos de lo que me encontraría por algunas reseñas que había leído, donde opinaban que era un libro más o menos normalito, entretenido pero sin nada nuevo. Eso fue lo que vi cuando leía los primeros capítulos, y pensaba: no sucede nada, se nos presenta a los personajes, Gabriel el hermano mayor y más responsable, Ivy la hermana que se hace cargo de la casa en plan "ama de casa-madre" y Beth, la más joven y que va al instituto. Hasta ahí todo normal.

Beth tiene un buen trozo en la historia, donde se va acostumbrando a la cultura humana, ya que ella nunca ha disfrutado de la Tierra, es su primera vez y todo es nuevo para ella:

"Una de las palabras más frustrante del lenguaje humano al menos por lo que yo sabía, era amor. Tantos significados distintos vinculados a esa palabra diminuta."

"¿No resultaba insultante?¿No debería existir otro término para definir una emoción más profunda.?"


"...pero a mí me parecía asombroso que los humanos permitieran que otra persona se adueñara de sus mentes y de sus corazones." "Me habían elegido porque yo estaba más en sintonía con la condición humana que los demás ángeles; yo me preocupaba por los humanos, me identificaba con ellos y procuraba comprenderlos. Tenía fe en ellos, lloraba por ellos." "...yo era un ángel en su forma más pura y vulnerable. Era ingenua y confiada, joven y frágil. Sentía el dolor porque no me protegían años de sabiduría y experiencia."

"Físicamente tenía, como toda mi familia, un aspecto etéreo, salvo por mis ojos, de un castaño intenso, y por la melena marrón chocolate que me caía en suaves ondas por la espalda."

Beth define a su hermana Ivy de una manera que me ha encantado, para dar a entender a alguien que tiene un instinto maternal y ternura por naturaleza, como una madre:



"..aspiré la embriagadora fragancia a freesia que parecía acompañarla siempre.



- Estás pálida -observó con su calma habitual, apartándose un mechón de pelo rubio platino que le caía sobre sus ojos grises. Ivy había decidido asumir el papel de madre abnegada en nuestra pequeña familia."

"Ivy llevaba tatuada en la muñeca una serpiente dorada, signo de su alto rango.(...) En su envoltura física, Ivy se parecía a una madonna del Renacimiento con aquel cuello de cisne y aquella cara ovalada y pálida."

En cambio Gabriel es todo lo contrario, un hermano mayor frío y calculador a primera vista, ya que es el ángel guerrero del Padre:




"Por su aspecto físico, Gabriel parecía una estatua clásica que hubiera cobrado vida. (...) Su pelo, largo hasta los hombros, era de color arena y lo llevaba recogido con frecuencia en una cola de caballo. (...) Gabriel era un arcángel y miembro de los Sagrados Siete."

Pero menos mal que más adelante, aparece en el instituto una figura que viene a romper el ritmo hasta ahora tranquilo y le da un poco de vidilla a la historia, un tal Jake, un chico misterioso y algo peligroso. Antes ya había aparecido el chico "bueno" del que Beth se enamora, Xavier. He de decir que el nombre no me gusta nada y hace que el personaje me parezca un tanto...no sé, calzonazos, sí, algo así jejeje pero en fin, es el chico bueno y tiene que ser así.

"...era imposible no reconocer aquella cara y aquel pelo castaño que aleteaba sobre unos vívidos ojos azules."

"Si Xavier era una enfermedad, entonces yo no quería curarme. Si la atracción que sentía por él constituía un delito que tal vez podría merecer un castigo divino, que así feura: que cayera sobre mí, no me importaba."

"Pero ya no había marcha atrás: quería hacer partícipe a Xavier de mi mundo secreto, deseaba con locura llegar a ese grado de intimidad."

La parte romántica de Beth y Xavier me ha parecido algo empalagosa, demasiado "todo rosa qué bonita es la vida" jajaja pero hemos de tener en cuenta una cosa: la escritora tiene 17 años, es decir, es como ella ve el amor, pero no pasa de un típico "enamoramiento", por lo que no le vemos profundizar en ello demasiado, dejando más bien la relación en algo inexperto y poco maduro a mi entender.

También aparece en escena Molly, la amiga de Beth,una chica pelirroja :



"Era una chica muy guapa. Tenía la piel sonrosada, rasgos ovalados y unos ojos luminosos. Por el color de tu tez, me recordaba a la chica de un cuadro que había visto: una pastora en un paisaje bucólico."

Ambos deben conocer a la familia del otro. Cuando Xavier va a casa de Beth ya sabe lo que va a encontrar, pues ella ya le ha dicho que son ángeles. Vale, antes de eso, ¿no sería lo normal que Xavier flipara tanto que se fuera corriendo? Cuando ella le cuenta o más bien le muestra lo que es, no es normal que él se quede tan ancho y le diga que no le importa, que él la quiere como es, ya que lo normal sería salir corriendo o pensar que está soñando. Esa parte no me ha parecido nada real. Aunque luego volviera con ella, su reacción es poco realista.

Y cuando es Beth la que va a casa de Xavier, son 8 hermanos y los padres, pero sólo habla la madre, y el padre ni abre la boca, vamos que la escritora ni lo presenta casi, sólo dice cómo se llama y él ni participa en la cena (¿?). Por muy callado que una persona sea, al menos decir hola o algo referente a "pásame la sal", aunque sea tendría que haber dicho, pero ni eso.

Suerte que hacia el final del libro, es cuando la acción empieza a desarrollarse por fin y aparecen las fuerzas del mal poniendo algo de salsa a la historia. Es en ese momento en que el libro empieza a valer algo, cuando los ángeles buenos tienen que parar los pies a los ángeles caídos o, como los presenta aquí, los demonios.

"Al pasar junto a la mesa de Jake y sus nuevos amigos, él levantó la vista y me clavó sus ojos oscuros. Durante una fracción de segundo, sentí que me ahogaba en sus profundidades."

Así que lo que recomiendo es que os deshagáis de todo pensamiento anterior, borréis de vuestra mente las críticas negativas (ya sé que es difícil) y leáis el libro como puro entretenimiento. Y aunque al principio veáis que "no sucede nada", ya hacia la mitad del libro empiezan a suceder varias cosas y luego la acción toma más velocidad, así que esa parte sí me ha parecido original, en cuando a los malos son realmente malos (no como en Hush, Hush que presenta al ángel caído peligroso pero tierno y medio bueno), sino que aqui son malos de verdad, y los buenos son buenos de verdad (demasiado santitoos, eso sí, quizá eso es lo aburrido, pero es original al menos, ya que no se intercambian los papeles como en casi todas las novelas). Tiene un trasfondo católico, eso sí, es demasiado...no sé, todo se ve desde una perspectiva católica y deja poco a la imaginación.

Este libro es el primero de una trilogía, por lo que se queda inconcluso, y tengo ganas de seguir con los siguientes, ya que justo cuando más acción hay se termina...

Trailer del libro: