Tic, Tac...

Lo único que escucho durante toda la tarde es el reloj de la pared sonando con su tic-tac, tic-tac. Casi me da miedo poner algo de música por si interrumpo ese ir y venir del tiempo. Da miedo pensar cómo corren los segundos y hacen que me aleje cada vez más de tí y de tu tiempo.

Mi dos tortugas me acompañan, y como la más grande no para quieta y se sale de la caja donde las tengo metidas con agua, he querido sacarla. A buena hora...no ha parado de rascar el suelo por allí por donde pasaba, se recorría todo el comedor, y ahora además del tic-tac del reloj, escuchaba su "Rash-rash" por el parquet...

Ahora hay un rash-rash y un tic-tac que me acompañan...pero no es suficiente, nada lo es para mí. Supongo que soy muy exigente y me gustaría escuchar un "hola, soy..." (quien sea, no importa). Hasta he pensado que cuando me llame algún vendedor le preguntaré cómo se llama, intentando mantener una conversación que no sea sólo de vendedor-cliente...¿lo conseguiré?.

Y luego están esas llamadas de teléfono donde no habla nadie..."Ring-ring"...¿Diga?..."silencio, solo silencio y el sonido de colgar". Vale, está bien. Ahora sí que me he vuelto loca o un asesino en serie anda detrás de mí controlando si estoy en casa para subir a matarme...o bien es un ladrón esperando a que salga de casa para robarme...qué más da, no será por nada bueno, seguro.

Ya no se oye el ring-ring, tampoco el rash-rash, sólo oigo el tic-tac...y creo que todo vuelve a empezar de nuevo...

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