La novela negra juvenil y algunos libros leídos sobre el tema

 

Como estoy leyendo justo un libro de esa temática (aunque mezclado con la fantasía urbana), he pensado en hablar un poco de la novela negra juvenil, ya que poco se ve de este género, y quizá haría falta un poco más de reactivación del mismo.

Creo que el primer libro que leí (juvenil) de esta temática fue El Joven Sherlock Holmes 1. El ojo del cuervo, de Shane Peacock, reseñado en el blog. Me entusiasmó mucho y me hizo empezar a buscar algunos libros semejantes, aunque ya con tintes de fantasía urbana de por medio, y criaturas de la noche...etc. Es así como he llegado a La magia muerde, de Ilona Andrews (pseudónimo de Iliana y Gordon, dos escritores), el libro que estoy leyendo ahora. Pero no quiero hablaros de él (todavía) sino que me quiero centrar un poco en la teoría y en los autores clásicos del género (siempre juvenil, descartando los de adulta).

Parece ser que algunos críticos profesionales de la literatura, consideran este género de novela negra mera ficción, sin que les incluyan en el mundo de las letras. Pero no es así. La novela juvenil policíaca no hace caso a este tipo de críticas y sigue su andadura en la literatura (y menos mal).

Pero no hace falta llegar al siglo XXI para encontrar el género, sino que tenemos grandes clásicos que así lo demuestran: Poe, Stevenson, Conan Doyle, Chesterton, Agatha Christie, Enid Blyton, Bioy Casares...entre otros.

La temática no tiene porqué siempre transcurrir alrededor de un crimen, como puede pasar en la novela adulta del mismo género. No suele haber asesinato pero sí un delito criminal (un robo, un secuestro...etc) y varios sospechosos, junto a un argumento con suspense, aventuras de los personajes y relaciones entre ellos. Esto, creo, es lo que de verdad permite a los jóvenes identificarse con los protagonistas y vivir las aventuras junto a ellos.

Lo principal, no obstante, es el misterio que hay que resolver, pues este es el eje central y como tal, deberá tener una estructura bien definida: principio, nudo y desenlace esclarecidos. No deben quedar cabos sueltos, a no ser que haya más libros que sigan a este primero convirtiéndose en una saga (sería el caso de Enid Blyton y su colección).

Pienso que el suspenso es primordial y el autor tiene que saber mantener al lector pendiente, enredarlo, conducirlo y aprisionar su interés. Es como ir montando un puzzle en el que las piezas antes desordenadas, deben finalmente encajar.

Cada vez que terminas un capítulo, hay que dejar una incógnita que te lleve a querer seguir leyendo el siguiente: claves, sospechas, alguna prueba del delito...etc. El autor presenta los hechos de manera que el lector se verá obligado a pensar en ello intentando resolverlo. Crea en el lector las ganas de investigar y hacerse sus propias cavilaciones para adivinar al culpable.

Pero además de esto, y mientras el protagonista investiga el caso, no olvidemos que hay una serie de pequeñas sub-tramas: temas relacionados y coditianos muchas veces, diálogos que agilizan la acción, problemas de los adolescentes...esto hará que el libro se haga más distendido.

El lector adolescente descubre que el protagonista es un detective  NO profesional, alguien de su misma edad y ansioso por desenredar el caos de la historia. No tienen porqué ser héroes, y además tampoco cuentan con la tecnología propia de un adulto profesional en el tema detectivesco. El echo de ser un chico/a normal como tú y yo, hace que el lector se identifique con él o ella.

También suelen vivir riesgos muchas veces, en la consecución de las pruebas por ejemplo, se meten donde no tendrían que estar (que quizá pertenecería al policía o al adulto). Sólo cuentan con su empeño, su energía, su interes y astucia, así como la ayuda de sus amigos. Son "débiles" en cierta forma, igual que el lector.

Es aquí importante el hecho de que el protagonista crece tras la experiencia vivida, nunca es el mismo que cuando empezó. Si no fuera así, serían personajes planos, alrededor de la historia, y pululando por ella, meras marionetas.

Debe quedar claro que el sospechoso, tendrá su castigo y será encarcelado o castigado, según el caso. Esto es lo que alimenta la idea de justicia en el joven lector (un ejemplo sería Twain y Julio Verne, o Conan Doyle). De ellos he leído algunos libros de Verne, como Viaje al centro de la Tierra, que me encantó, aunque no sea policíaco ni mucho menos.

Y ya para concluir la historia, estaría bien un final que nos sorprenda, sería como la guinda del pastel. No dejar cabos sueltos. Y si es posible, un final feliz, aunque respecto a esto no tiene porqué ser obligatorio, pero quizá es lo que más satisfecho deja al lector, el verlo todo resuelto, donde también se cierren sus historias personales en relación a sus amigos y vida personal (estas sub-tramas de las que os he hablado antes).

 

Edgar Allan Poe fue fundamental en este punto, la pieza clave en la que se asienta esta literatura: enigma y personaje capaz de desvelarlo: novela de misterio. A partir de los años 60, se desplaza el interés hacia la violencia social, la denuncia, la verosimilitud de la época de Hammett, Chandler, Cain y MacDonald, quienes convierten la realidad de los negros de Harlem o la violencia del bajo mundo en su género preferido.

Y ahora sí, hoy día, y según mi corta y pequeña experiencia sobre el tema y sobre los pocos libros que he leído, creo que ha habido un giro claro de este tipo de novelas hacia el género "paranormal" (es lo que he pensado al leer el libro que estoy leyéndome ahora): hay misterio sí, pero el detective cuenta con poderes especiales, o a menudo es un cazador/a de las criaturas que persigue, normalmente vampiros o hombres lobo, aunque también brujas...etc.

Y a donde quería llegar, este es el caso del libro que nos ocupa y del que hablaré próximamente: La magia muerde, donde Kate investiga la muerte de su guardaespaldas, armada de dos increibles dagas (estilo asesina de videojuego), mientras se encarga de la desaparición de las criaturas culpables o vinculadas al asesinato, y ella misma las va matando o capturando. También puedo mencionar otros tres libros que he leído, de fantasía urbana paranormal, que se relacionan bastante con este: Bruja mala nunca muere, Ángeles extraños o Vínculos sangrientos de Patricia Briggs, reseñados en el blog.

De esta última autora leí Cry Wolf, aunque este no me gustó demasiado, pero pienso que sería más novela adulta, no estoy segura. Me viene también a la cabeza un libro reciente, La ciudad de la bruma de Daniel Chambers, que va por el mismo tema más o menos.

Espero no haberos aburrido demasiado. Como yo no soy experta en el tema, desde ahora ya me disculpo por los posibles fallos que haya cometido al hablar sobre esto. Todo es desde mi humilde experiencia, teniendo en cuenta que tampoco he leído muchos libros de novela negra adulta, por no ser el género que más me va, que es la fantasía.

Sobre las fuentes consultadas para escribir el artículo, he leído los principios teóricos sobre autores clásicos, de la autora argentina María Brandán Aráoz y he seleccionado algunas imágenes escogidas de Internet; así como utilizado libros leídos por mí y reseñados en el blog para explicar el tema de hoy día referente a lo paranormal.

Si se os viene a la cabeza algún libro más juvenil de novela negra, hacédmelo saber en los comentarios y así añado una pequeña lista en el post para aquellos que quieran leer libros del tema. Gracias =)