Reseña: Ángeles desterrados, Anabel Botella

"Las mañanas son frías sin tus caricias.

Las noches son eternas sin tus palabras.

Dime pequeña si deseas volver a mis brazos,

pues en ti está la solución."

Título: Ángeles desterrados

Autor: Anabel Botella

Lugar de publicación: Madrid

Editorial: Nowevolution

Año: 2011

Páginas: 254

Personajes: Keilan, María, Grunontal, Nitya, Marta, Llanos, Núria, Larma, Yunil

Temática: ángeles y demonios, sombras, paranormal romántico

Localización espacio-temporal: Águilas, siglo XXI

Resumen oficial:

Anabel Botella ha creado un mundo tan cercano a nuestra realidad, que la novela aunque muestra el lado más mitológico de nuestra historia, nos pone al alcance de la mano los ángeles y la batalla eterna entre el bien y el mal.

Hay amores que son inmortales, que traspasan todas las barreras del tiempo y del espacio. Keilan lo sabe. Ha esperado a María durante siglos. Ahora dispone de una semana para que ella recuerde quién es… quiénes son: Ángeles desterrados sobre los que pesa una terrible maldición.

Mi opinión:

Es esta una historia de amor ambientada en un decorado fantástico, rodeada de ángeles y demonios, sombras (muertos) y genios, cambiantes y vampiros...

He de decir que María, la protagonista humana-ángel me ha caído fatal, por lo que aunque la historia me ha gustado en general, se me ha hecho un poco inaguantable leerla en las escenas en que salía ella, que es en la mayoría, si bien Keilan, el chico de la novela, la ha salvado, en mi opinión. Creo que es una mujer-niña caprichosa e irritable, y si yo hubiera sido Keilan la paciencia se me hubiera agotado al principio del viaje que emprenden juntos.

Keilan, el chico-ángel protagonista, se desvive por María, la mujer de la que ha estado enamorado desde siempre, durante siglos, antes de que ella volviera a la tierra como humana. Creo que este chico es un auténtico calzonazos, la sigue como un perro faldero, y a pesar de que ella le trata fatal, el siempre tiene una sonrisa preparada para ella. 

La historia de amor está bien, es un viaje durante el cual vamos viendo como renace el amor entre la pareja, aunque María no se acuerda de nada anterior a su vida en la tierra, por lo que es como si la historia empezara desde el principio, por lo que Keilan debe "reconquistarla" y para ello solo cuenta con 7 días.

He de decir que me ha chocado que salieran gitanos en el libro, no me lo esperaba para nada, y me ha hecho gracia la parte donde aparece la abuela de María, la Tizná, con sus típicos gritos al más puro estilo español de pueblo. Si bien creo que eso desentona bastante con los ángeles, y quizá eso sea lo original del libro, una historia de fantasía pero ambientada a la española. 

Aquí no veremos ángeles caídos típicos, sino bastante "humanos", aunque no sea esa su principal característica, pero sí que los he encontrado muy cercanos a las personas, no como esos típicos ángeles fríos y en su propio mundo. 

Creo que la villana, Grunontal, está magnífica en su papel de mala, muy bien tratada. Y me permitiréis que diga que María es un poco tonta de no presentirla cuando se le aparece, no sé, como que va demasiado despistada y no pilla las indirectas de Keilan tampoco con la cantidad de veces que "se le insinúa". ¿No se supone que está acostumbrada a que los hombres se le echen encima a lo bruto, como ese vecino suyo que no puede ni ver?. Pues contrasta mucho con su manera de ser frente a Keilan, como que se transforma en una chica demasiado ingenua ¿verdad?.

Durante todo el trayecto Keilan se desvive por María y en cambio ella no entrega nada a su vez, sino que se pone pesada durante el camino con sus caprichos y "tonterías varias". Esa parte no me ha gustado nada, encima que la lleva sin pedirle nada, ni dinero ni nada material tampoco, y ella se lo paga tratándole tan mal...no sé...no es justo para él creo. 

El libro va haciendo aparecer dos tipos de letras para diferenciar el presente del pasado como ángeles de la pareja. 

Lo que sí me ha encantado han sido las niñas hermanas gemelas, Llanos y Marta. Es la parte con la que más he disfrutado de todas, con la chica muerta (sombra) y la chica viva que el padre tiene que sobrellevar, sabiendo que no es una situación muy normal en una familia, y debe hacerse duro para él. Las travesuras de las niñas me han gustado bastante, y la personalidad de Llanos también.

Por último, también veremos una alusión a la chica de la curva, Núria, con sus amigos sombras que la acompañan y ayudan a Keilan en alguna ocasión hacia el final del libro. En general la historia me ha parecido un poco edulcorada, algo ingenua pero muy "típical spanish", y eso es lo que le da ese toque de humor a todo. No puedo por menos que recomendarla para pasar un rato entretenido.

Puntuación:

Está bien

Trailer: