Reseña: Oblivion, Francesc Miralles

Título: Oblivion

Autor: Francesc Miralles

Lugar de publicación: Barcelona

Editorial: La Galera

Año: 2012

Personajes: Sasha, tio Zeus, Birdy, Alejo

Temática: realista, romántica

Localización espacio-temporal: La Graciosa (Lanzarote), siglo XXI

Resumen oficial:

El joven Sasha pasea por un mercadillo con su amiga Birdy cuando encuentran un bar llamado Oblivion, que nunca habían visto antes. Allí, Sasha conoce a Ivonne, que sueña con liarse con un extraterrestre y le cuenta que el amor es un virus de otro mundo que nos permite encontrar nuestro verdadero origen. Cuando Sasha despierta el día siguiente, parece que todo ha sido solo un sueño. Es como si el bar nunca hubiera existido. Pero un día recibe un correo de alguien a quien no conoce, y que afirma que Oblivion es muy real y que ella tiene la clave para acceder.

Mi opinión:

En primer lugar, destacar que los capítulos de esta novela son cortísimos, lo que ayuda a su lectura y agilidad en la historia, y va muy bien para cuando no tienes mucho tiempo y así no quedarte a medias de un capítulo, lo que es bastante práctico.

El narrador es Sasha, un chico de 16 años que ha sido enviado a estudiar fuera de su pueblo, Lanzarote, a Madrid, donde vive su tío Zeus. El lenguaje es directo, la letra grande y sencilla. Nuestro protagonista es un apasionado de la ciencia-ficción, a la que hace referencia en muchas ocasiones, y le gusta especialmente el planeta Marte. Cuando tenía 10 años subió a una montaña roja como él le llamaba, para llegar a la cima y hacer ver que llegaba a ese planeta, con la sorpresa de que allí habia una niña de pantalones rojos y unas alas que también subia como él. Una vez allí, ella no dijo nada, y simplemente, se tiró hacia abajo. Pasó mucho tiempo hasta que ya de mayor, se la encuentra en circunstancias algo extrañas.

Cuando él llega a Madrid, descubre que su tío vive en condiciones precarias en una rulotte de un camping abandonado llamado Stardust, porque ha perdido su piso al no poder hacer frente a las letras de la hipoteca, ya que hace poco ha perdido también su trabajo. Lo que sería la situación actual de muchos españoles debido a esta crisis, por lo que en seguida te sientes identificado con su situación. Su tio le pide que no diga nada a sus padres, y él así lo hace, pues le apetece quedarse allí, no quiere volver con su familia de momento. Su tío le inscribe a un instituto privado llamado Duquesa de Orleans. Allí conocerá a Alejo, un chico bastante alegre y optimista que le intenta animar presentándole a dos chicas del lugar.

En el camping, una vez que él está solo porque su tio ha tenido que ser hospitalizado, conocerá a Birdy, una chica muy peculiar que se ha escapado de casa y ahora vive en la gasolinera abandonado, cerca del camping, así que será su nueva vecina y amiga durante un tiempo. Con ella compartirá sus problemas, y su música. 

En el libro hay muchas referencias a frases budistas, y a la importancia de vivir en el presente y aprovechar lo que tenemos a mano. Yo diría que es una especie de libro de autoayuda novelado, y juvenil, algo que no habia visto hasta este momento, pues logra crear misterio gracias al descubrimiento de un local llamado Oblivion, donde una extraña chica baila y donde Sasha se enamora por primera vez. El local desaparecerá el siguiente día en extrañas circunstancias, y ahí empezará una búsqueda del amor por parte de Sasha, pues esa chica tiene algo que le llama poderosamente la atención.

Es un libro romántico pero sin rozar lo pasteloso en ningún momento, sino algo más bien realista y ambientado en un lugar pobre socialmente hablando. No esperaba una historia así, yo creía que sería algo más bien de ciencia-ficción, pero no esperéis ver nada de eso. Es una historia de amor entre dos adolescentes, así como también de amistad, con reminiscencias góticas estilo Retrum, su anterior novela.

Puntuación:

Está bien