Reseña: Kárvadan, Carles Batlle

Título: Kárvadan. La leyenda del impostor

Autor: Carles Batlle

Lugar de publicación: Barcelona

Editorial: La Galera

Año: 2012

Páginas: 567 

Personajes: Lía, Sigurn (Pol), Pirru, Páltor, Ánidam, Kulian, Jan, Nemrod

Temática: Fantástica 

Localización espacio-temporal: Valle de los Troms, pasado y La Garrotxa, presente

Resumen oficial:

En el verano de 2011, Pol Bársac se descuelga por el balcón de su casa y huye de la policía; quieren arrestarlo por actividades de sabotage durante las manifestaciones de los indignados. Es así como, intentando ir a Francia, se interna a pie por las abruptas montañas de la Alta Garrotxa...

Por un estraño fenómeno físico, Pol es transportado a otra dimensión, a un universo fantástico lleno de magníficas ciudades encastilladas, animales inverosímiles y selvas frondosas, que curiosamente le resulta muy familiar. Para sobrevivir en este mundo tendrá que suplantar la personalidad de un ser mítico, Kárvadan, responsable de salvar a los habitantes amenazados por una plaga maldita. La misión lo llevará a enfrentarse a peligros y trampas de los hombres y de la naturaleza. Y conocerá a Lía, una princesa que lo acompañará en su misión y con la que vivirá una apasionada historia de amor. Los dos tendrán que superar pruebas difíciles que cambiarán su personalidad y les descubrirán el sentido de la fidelidad, la amistad, la valentía y la pasión.

Mi opinión:

La historia  se alterna en capítulos sobre el pasado fantástico y el presente realista. El primero narrado desde el punto de vista de una princesa, Lía, hija de Páltor, y el segundo narrado por la experiencia de Pol, el protagonista de nuestro presente. Me ha gustado mucho porque tenemos tanto el punto de vista de alguien del presente que nos va contando como va descubriendo ese mundo que no entiende, totalmente fantástico, y también tenemos el punto de vista de la chica de ese mundo, que no entiende el presente de Pol ni sus palabras pero que poco a poco va comprendiendo lo que rodea a Sigurn (Pol), o lo que ella cree que es ese dios que su pueblo anhela ver llegar y que piensa que va a salvarla de la maldición, de la muerte de las mujeres de su poblado.

Uno de los personajes que al principio me ha gustado mucho, y que me ha recordado a Gandalf, es Zoltán, un mago que parece ser el mentor de Lía, la princesa y que siempre le acompaña. Aunque en esta historia, será Nemrod, su discípulo, quien acompañe en su aventura por el bosque a la chica.

El libro contiene temas como el viaje en el tiempo de Pol y también un montón de criaturas que van apareciendo en este mundo mágico y fantasioso: los troms, una especie de tigres de gran tamaño; los lingus, una especie de lobos que aparecen por las noches cuando están acampados; los gráfulos...y una serie de pequeños animalitos que hacen de comida para estos personajes de fantasía, estos guerreros. 

"Una explosión mucho más fuerte que las otras hizo estremecer las paredes de la cueva...Todo debió de suceder en menos de un segundo, pero lo recuerdo como si el tiempo se hubiera dilatado y mi  pensamiento hubiera podido corporizarsse y extenderse como una sábana y ocupar el espacio. Espacio de tiempo...No me entiendes, ¿verdad...?. La claridad avanzaba a cámara lenta por el túnel precediendo al tentáculo de fuego que la provocaba. Pero antes de que llegara, un embate repentino, no sé si algún tipo de onda expansiva, de campo eléctrico o de bufido a presión, nos impelió hacia adelante abruptamente...Y, no obstante, con suavidad: la delicadeza de un vuelo en el vacío acompañados de la música de Bach o de Mozart. ¿Qué sucedía? Sin prepararlo ni desearlo, ambos flotábamos por encima de la garganta del abismo."

También conoceremos a los boods, o señores de los bosques. La capacidad narrativa y literaria del autor la podemos comprobar en descripciones como estas:

"Algunos soldados de mi padre me habían contado que la Gente del Bosque, los boods, ha cultivado la habilidad de transitar por encima de esa red...No debes fiarte de las cosas bellas, hijo. En Trom-mor, la claridad se distribuye en incontables haces de luz que van dando cabriolas y se distraen con el arte de crear espejismos; si te despistas, pronto empiezas a soñar despierto y te sientes como si realmente habitaras en fantásticos espacios de maravilla."

Uno de los momentos más intensos de la novela  ha sido cuando Kulian, el hombre que rescata a Pol en el bosque y él mismo, son perseguidos por el trom, ese tigre gigante que los acecha:

"Esta vez el grito era mucho más amenazador que antes, más  intenso, más crudo, más cercano. Había sonado justo detrás de nosotros, o por encima de nosotros."

Es un mundo que podemos identificar como la época medieval pero rodeado de fantasía y de los típicos paisajes que Alicia podía encontrar en su País de las Maravillas, como cuando se describen las flores que encuentra Pol tan distintas a las que cabría esperar en ese lugar:

"Había flores amarillas de aquellas de las caritas inquietantes, pero también las había rojas, lilas o blancas, tan grandes que parecían de otro mundo..."

El volumen está dividido en dos partes claramente diferenciadas: la parte de la historia que corresponde al viaje por el Valle de los Troms y luego la parte en la Ciudad Blanca. Hay también muchos momentos humorísticos e irónicos en algunos casos, que hacen muy entretenida y distendida la lectura, a la vez que rápìda, tanto que lees la mitad del libro sin casi darte cuenta. Uno de esos momentos que me ha llamado la atención es cuando Pol se da cuenta de que no está en una película ni en un juego de rol, sino que se trata de la vida real en algún momento del pasado. Conoceremos a los habitantes llamados lonburianos y también a los munburianos. Todo un mundo original muy bien construido.

"Era yo. Me había empapado del olor del mono, que, curiosamente, no resultaba nada desagradable, más bien era un olor familiar...Olor a seta...No, no es broma, de verdad, aquel  homínido olía a seta, a setas a la brasa. O, para ser más precisos: ¡olía a níscalos! Níscalos con ajo y perejil."

"Él parecía pasárselo bien, tieso y seco como un bacalao, y cuando más tiempo transcurría más rígido estaba..." (cuando el trom se deja acariciar por Pol)

El protagonista se plantea varias veces que es una persona diferente, nueva, que ha cambiado en aquél lugar. No era nadie en su presente, y en cambio, en este lugar de tiempo y espacio desconocidos, sobrevivía a las aventuras más increíbles y sin casi esfuerzo, con una serie de casualidades y personas que le van salvando la vida. Es curioso como le creen un dios, cuando realmente son los demás los que siempre le están salvando, incluída Lía, quien le cura las heridas:

"Otra vez aquél coraje inesperado. Pero ahora era de verdad, te lo juro: uno cree que se conoce a sí mismo pero no sabe nada, ya te lo he dicho. Uno nunca sabe cómo puede llegar a reaccionar en determinadas situaciones, situaciones extremas. Y para muestra, un botón: habían trastocado las leyes del universo, la pauta que regía mi mundo se había invertido, y como resultado todos los resortes de mi conducta, de mi personalidad, se habían modificado sensiblemente. ¿De donde salía tanta determinación, tanta osadía?"

Hay  también mucha ironía en una historia que te cuenta una leyenda sumamente importante para un pueblo que cree en ella a pies juntillas, en Sigurn, el Kárvadan que los salvará de la maldición, y como es confundido con Pol, que aún siendo un hombre normal tiene una suerte increíble y es tomado por un dios, aún siendo torpe. 

Vemos cómo la cadena de acontecimientos van acoplándose de tal manera que crea una situación a la vez humorística e imposible en un mundo de fantasía. Alguien débil es capaz de dominar a una bestia simplemente utilizando unas técnicas de distracción. Me ha hecho pensar en la escena de la película King Kong, cuando la chica rubia baila ante él y éste no la mata sino que además la salva y se enamora de ella.

Poco a poco Lía y Pol se irán conociendo más y entre ellos surgirá una relación especial:

"A mi pensamiento solo acudían las canciones, las risas, nuestras largas conversaciones, las caricias, los besos, el olor de la piel, el estremecimiento de la pasión...Y también los ratoss de cocina y de caza, las frescas madrugadas acurrucada a su lado."

Hay situaciones grotescas y que no te crees como pueden ocurrir, como cuando los lingus (una especie de lobos salvajes) intentan atacarles de noche y al rato se calman como gatitos domesticados. 

"Hacía un momento daba la impresión de que los Grandes Canes querían abalanzarse sobre  nosotros; ahora, en cambio, los veía amansados y amistosos, y ya no me inquietaban ni gota."

El libro está impregnado de leyendas, entre ellas la del propio Sigurn y también la del Hombre de los Lingus, como una especie de "pastor" de lobos. Recomiendo encarecidamente su lectura, lo váis a disfrutar, en especial los fans de la fantasía épica y el humor mezclados, con una gota de romance.

Puntuación:

¡¡Genial!!