Reseña: Maravilloso desastre, Jamie McGuire

Título: Maravilloso desastre (galeradas)

Autor:  Jamie McGuire

Lugar de publicación: Madrid

Editorial: Suma de Letras

Año: 2013

Páginas: 441

Personajes: Abby, Travis, America, Shepley, Mick

Temática: realista, violencia, juego, alcohol

Localización espacio-temporal: Las Vegas, s. XXI

Resumen oficial:

Abby Abernathy no bebe, no se mete en líos y trabaja muy duro. Cree que ha enterrado su oscuro pasado, pero cuando llega a la universidad, un rompecorazones -conocido por sus ligues de una noche- pone en peligro su sueño de una nueva vida.

Travis Maddox, sexy, musculoso y cubierto de tatuajes, es justamente el tipo de chico que le atrae a Abby, justamente lo que quiere evitar. Dedica sus noches a ganar dinero en un club de lucha itinerante, y sus días a ser el estudiante ejemplar y el seductor más popular del campus. Toda una mezcla explosiva.

Intrigado por el rechazo de Abby, Travis intenta colarse en su vida proponiéndole una apuesta que trastocará sus mundos y lo cambiará todo.

En cualquier caso, Travis no tiene la más mínima idea de que ha iniciado un tornado de emociones, obsesiones y juegos que los terminará dañando,… aunque puede que también los una para siempre.

Mi opinión:

La primera pregunta que surge en mi cabeza al finalizar la lectura de este libro es ¿quién quiere sufrir tanto en una relación tan insana como esta?¿realmente alguien sueña con algo así en su vida?. El libro está lleno de violencia al extremo, sin casi un momento de paz y calma en la historia, o una cita romántica normal entre seres que se aman, sin peleas o broncas continuamente. 

Quiero llamar en primer lugar la atención sobre el título del libro: "Maravilloso desastre" (Beautiful disaster). Quiero dejar claro que esta historia no tiene nada de "maravillosa", yo no la hubiera definido así. Quizá con "totalmente desastrosa" sería algo más adecuado para lo que ocurre en este libro. No digo que el libro esté mal escrito o mal llevado, al contrario, define maravillosamente bien lo que no tiene que ser una relación sana, te da el ejemplo exacto de aquello de lo que debes huir nada más que lo veas aparecer en tu vida, pues no solo te destroza por fuera, físicamente, te desgasta también moral y emocionalmente, por dentro, mina tu espíritu y te humilla hasta lo sumo. No tiene nada bueno buscar un tipo de relación estable junto a alguien que siempre, siempre, está metido en peleas, es celoso, y te trata como una posesión. Y no solo eso, sino que para ganar dinero, también se gana la vida peleando contra otros en peleas ilegales, siempre a punto de que la policía aparezca y te meta en la cárcel. Esta no es vida para una chica, y Abby parece no tenerlo claro.

"Desde que America había conocido a Shepley en la sesión de orientación del primer curso, solía acompañarlo a las peleas clandestinas que tenían lugar en  los diversos sótanos de la Universidad de Eastern. Cada evento se llevaba a cabo en un lugar diferente y se mantenía en secreto hasta una hora antes de la pelea."

Abby y America huyen de sus hogares por la violencia que Abby vive en su casa, su madre alcohólica y su padre jugador de pocker, que la utiliza desde los 13 años para ganar dinero jugando a las cartas. Es una familia totalmente disfuncional y por eso no entiendes que, siendo que escapan de eso, se vuelvan a dar de bruces con unos chicos que son exactamente iguales a sus padres: les encanta beber y les encantan las peleas, eso es una constante en su vida diaria, así como, por parte de Travis, es totalmente normal llevarse a dos chicas al apartamento cada noche para despedirlas en unas horas y volver a repetir la experiencia una y otra vez. Una de las veces, ¡con la propia Abby viviendo con él en su apartamento!. ¿Pero qué es esto?

"Un desastre. El juego, la bebida, el mal carácter..., todo eso es hereditario en mi familia. America y yo vinimos aquí para que yo pudiera empezar de cero, sin el estigma de ser la hija de una vieja gloria famosa por sus borracheras."

Lo que algunas personas podrían definir como amor, yo aquí defino este tipo de relación más como codependencia, pues Travis ve a Abby más como una posesión, y le pueden los celos cada vez que algún chico la mira. Eso sí, tiene muy claro que él puede llevarse a la cama a las chicas que quiera, aún estando saliendo con ella. Eso sí no tiene perdón. Porque que tú hagas lo que quieras con tu vida tiene un pase, pero que impidas hacer lo mismo a la otra persona sí que no lo entiende nadie: machismo puro y duro, en pleno siglo XXI.

¿Qué clase de chico lleva a su novia o amiga o compañera incluso, a una pelea violenta con apuestas y todo incluido, como si fuera el mejor espectáculo del mundo? A un lugar lleno de hombres borrachos y golpes por todos lados. ¿Y qué clase de chica acompaña a un chico a un lugar así? Pues sí, esta parejita tan atípica, Travis y Abby, son asiduos ya a las peleas. Y aunque en una de ellas un chico, Ethan, está a punto de violar a Abby, Travis vuelve a llevarla a otra pelea más...y eso no es todo, ¡ella acepta de nuevo!.

Una y otra vez ella se da cuenta de que no quiere repetir de nuevo la vida de la que ha escapado en su casa, y una y otra vez ella vuelve a caer en la misma piedra y vuelve con Travis, a pesar de todo lo que está haciendo. Pero es que ella tampoco se queda corta: trata a Travis fatal, rompiéndole el corazón sin decirle que le quiere y utilizándolo continuamente, incluso se acuestan juntos a dormir cada noche en la misma cama sin que pase nada. ¿Eso no es forzar las cosas un poquitín? Ella le dice que solo son amigos pero luego se acuesta con él en su cama, abrazándolo y haciéndoselo pasar fatal, pues él está enamorado de ella. Esa relación es asfixiante totalmente, es que no tienen un momento a solas cada uno para respirar y pensar en lo que están haciendo. Porque creo que si estuvieran solos unos días se darían cuenta de que esa relación es totalmente dañina, dolorosa, y no puede salir nada bueno de ese tipo de vida.

America, su amiga, tampoco es diferente a Abby, pues Shelpey también lleva la misma vida que Travis, aunque es un poco más controlado en lo que se refiere a ir con chicas, pero igual de violento pues vive en el mismo mundo que su amigo y debe sacarlo más de una vez de los líos en los que se mete.

"America renunció a mucho para venir conmigo y que así yo pudiera escapar; pero llego aquí y me doy de bruces con Travis.

- Y cuando miras a Travis...

- Todo me resulta demasiado familiar."

"Iniciar una relación con Travis iba en contra de todo lo que habíamos hablado, y mi amiga se había convertido en su sobreexcitada animadora"

Es un libro que trata a fondo el problema de la violencia, pero no porque la autora trate bien el tema y lo haya trabajado, voy a estar deacuerdo con esta filosofía de vida. No es algo de lo que uno se debiera sentir orgulloso. Pienso que la autora quiere decirnos con todo esto que de todos los problemas se sale, que hay que luchar por tu amor y todo eso, pero aún así, no estoy deacuerdo con ella en que para solucionar un problema de alguien tengas que ser su novia. Antes de iniciar una relación con alguien, mírate a ti mismo y trata de mejorar, de centrarte, de llevar una vida de la que puedas sentirte orgulloso y no una en la que cada noche vuelvas con moratones a tu casa. ¿Como puedes siquiera pensar en formar una familia así en un futuro? Pues eso es lo que Travis quiere, vivir para siempre con Abby, hasta el punto de que la termina asfixiando con tanto acercamiento, es que no la deja ni ir al baño sola como quien dice, la persigue entre clase y clase, le pide que esté con ella en su apartamento todos los días...y ¿ella acepta eso? Pues eso parece porque no se despega de él aún sintiéndose incómoda con la situación, pasando vergüenza más de una vez cuando ella intenta tener otro tipo de relación más tranquila con alguien y viendo como Travis se lanza a pegar a su acompañante cada vez que ella lo intenta.

Travis no acepta su ruptura cuando Abby le muestra como se siente, no acepta que ella le deje, es más, es que se lo impide. Está forzando a Abby a llevar una vida que nadie en su sano juicio querría tener, y encima sabiendo por lo que ella ha pasado antes con su familia. Es el colmo, no se entiende esta situación.

"Te quiero allí. Te quiero allí todas las noches."

Es un mundo de alcohol, peleas, sexo, apuestas, deudas de juego...un ambiente sangriento en el que nadie querría vivir. Pero parece ser que este tipo de chicos, violentos, rebeldes...etc atrae mucho cierto tipo de chicas, las perfectas "víctimas" para este tipo de personajes "dominantes". Y Shelpley intenta avisar a Abby de donde se está metiendo en dos ocasiones:

"Eres una chica inteligente, Abby. Ahora bien, si caes en su puto juego y acabas cabreándote con  él, no la pagues conmigo o con America, ¿vale?"

"No sé qué hay entre Travis y tú, pero sé que hará algo estúpido para cabrearte. Es un tic que tiene. No se acerca a nadie muy a menudo, y, por la razón que sea, contigo lo ha hecho. Pero tienes que perdonarle sus demonios. Es la´unica forma que tiene de saberlo."

La gracia es que Abby ya se da cuenta de todo eso, pero aún así es tan masoca que sigue con él, le perdona una y otra vez, y siempre él vuelve arrepentido y con sus disculpas de perrito abandonado, con esa cara de pena que no engaña a nadie, solo a ella parece.

"¿Siempre tienes tan mal genio o eso cambiará una vez que creas que todo esto no es parte de un elaborado plan para meterme en tus bragas?"

"Al cabo de  unos segundos, gemidos, jadeos y gritos llenaron el apartamento. Sonaba como si estuvieran rodando una película pornográfica en el salón. Me tapé la cara con las manos y sacudí la cabeza. Una roca impenetrable había ocupado los límites que hubieran podido difumianarse o desaparecer la semana anterior. Intentaba librarme de mis ridículas emociones y forzarme a relajarme. Travis era Travis, y nosotros, sin lugar a dudas, éramos amigos y solo eso."

Los celos están muy presentes por parte de Travis:

"Sé que no lo decías en serio. Pero tienes que dominar ese sentimiento sobreprotector de hermano mayor que te hace perder el control."

Y una cosa que es totalmente ridícula: Abby saliendo con Parker. Esa relación es poco creíble desde el principio, pues ella ya sabe de los rumores que corren sobre lo que hace, parece ser un violador. ¿Porqué confía Abby en él después de saber eso? Incluso aunque no fueran cierto los rumores, yo tendría miedo de ese chico, es que ni me acercaría a él.

Abby se está comportando igual de mal que Travis, pues juega con Parker y le da esperanzas, cuando ella no siente lo mismo que siente por Travis, del que sí está enamorado. Ella acepta sus regalos caros y luego le da la patada en el culo a la mínima ocasión en que aparece Travis buscándole para volver con ella o volver a ser amigos. Y claro, Parker tampoco es tonto y aprovecha cuando ella está mal con Travis para meter baza e intentar ligársela. Abby no está siendo coherente con sus sentimientos:

"Me había dividido en dos personas diferentes: la chica dócil y educada que era con Parker y la persona irascible y frustrada en la que me convertía cuando Travis estaba cerca. Toda la universidad había visto a Travis pasar de ser impredecible a prácticamente volátil."

"Lo que yo te decía -insistió ella, retorciendo las manos alrededor del volante-. Travis es lo que quieres, y Parker, lo que crees que te conviene."

Aún a sí, Abby cree que debe salvar a Travis de su  propia vida, salvarlo del desastre y se enfrenta a sus propios sentimientos sobre lo que debe o no debe hacer con él:

"Travis cerró los ojos y sentí que me hundía. Era terrible verde padecer ese sufrimiento y saber que yo era no solo la causa..., sino la única que podía librarlo de él."

"Pensé en los diferentes giros que mi vida podía dar a partir de ese momento: confiar en Travis dando un salto de fe y arriesgarme a caminar por arenas movedizas, o apartarlo de mi vida y saber exactamente dónde acabaría, lo que incluía una vida sin  él. Ambas decisiones me aterraban."

Pero Kara, compañera de habitación de Abby en el Morgan, le explica lo que ella sabe acerca de la codependencia:

"Es peligroso necesitar tanto a alguien. Tú intentas salvarlo y él espera que lo hagas. Sois un auténtico desastre."

"Somos una pareja disfuncional, Travis. Creo que estás obsesionado con la idea de poseerme más que con cualquier otra cosa."

La ira de Travis es incontrolable conforme pasa el tiempo:

"Cada vez le costaba más controlar la ira que se apoderaba de él. Ser la excepción ya no era algo misterioso o especial. Me había convertido en su debilidad. Igual que había pasado con mi padre."

"Las Vegas cambiaba a la gente: creaba monstruos y destrozaba a los hombres. Era fácil dejar que las luces y los sueños robados se mezclaran con tu sangre.Había visto la mirada llena de energía e invencible de Travis muchas veces mientras crecía, y la única cura era un avión de vuelta a casa."

Y Abby le dejará claro a Travis que no es una posesión o un trofeo para enseñar al resto de la universidad:

"No soy de nadie -dije a la habitación vacía.

No pertenecía a nadie. Nunca me había sentido tan sola en mi vida."

"Eres mi amuleto de la buena suerte. 

- No soy nada tuyo -le espeté, fulminándolo con la mirada.

Y eso es todo en esta historia: pelea tras pelea tras pelea. Malentendidos y secretos inconfesados, sentimientos mal demostrados, mal encarados. Relaciones disfuncionales y mucha violencia. Toda novela está rodeada de un ambiente que te asfixia, un ambiente muy recargado con aspectos negativos, con sentimientos fuertes e incontrolables. 

Puntuación:

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