Reseña: La máquina del tiempo, H.G. Wells (Reto Steampunk)

Como ya sabéis, decidí hacer el Reto Steampunk para ir leyendo libros de esta temática, que me está empezando a fascinar, podéis leer las entradas aquí, aquí y aquí. He empezado por leer el precursor del género del autor H.G. Wells, que junto a Julio Verne podríamos decir que son los pioneros de esta especie de ciencia-ficción combinada con cosas de la época industrial típicas del género steampunk.

Así que aquí os dejo ya la reseña del primer libro del reto titulado "La máquina del tiempo":

Título: La máquina del tiempo

Autor: H.G. Wells

Lugar de publicación: Barcelona

Editorial: Bruguera

Año: 1981

Páginas: 157 

Personajes: el viajero en el tiempo, Weena, otros científicos

Temática: steampunk, ciencia-ficción, viajes en el tiempo, otros mundos, pasado, futuro

Localización espacio-temporal: Londres, año 802.401

Resumen oficial:

Obra que se halla en los inicios de la novela de ciencia-ficción. La máquina del tiempo sigue conservando el mismo poder de fascinación y vigor narrativo que le valieron el éxito inmediato en el momento de su publicación. Afortunada síntesis de los conocimientos científicos del autor, del maquinismo que hacía furor en la época y de la visión escéptica de Herber George Wells.

Mi opinión:

Nos hallamos aquí ante una novela corta de tan solo 157 páginas en su versión en español, que puedes leerte del tirón, ideal para una tarde de domingo en la que quieras desconectar de todo y sumergirte en otro mundo totalmente nuevo y desconocido.

Es un clásico de la literatura juvenil y el precursor del steampunk, género del cuál ya os he hablado anteriormente, pues en la obra aparece la tan conocida "máquina del tiempo" mediante la cual, el protagonista, narrador también de la historia, va viajando a distintos lugares tanto del pasado como del futuro, y es en estos últimos viajes al futuro en los que hace incapie para mostrarnos un mundo donde no existen las enfermedades, donde no parece que nadie muera pues no se han hallado cementerios ni lugares de cremación y tampoco envejece nadie. 

El autor utiliza un lenguaje propio clásico del siglo XIX pero aún así y por ir dirigido a un público juvenil es de fácil lectura. Quizá algo soso el hecho de que solo haya un personaje protagonista y el resto sean solo personajes secundarios.

Vamos a encontrarnos con interesantes criaturas, algunas de las cuales encuentra el personaje principal en su viaje al futuro, concretamente al año 802.701 nada más y nada menos, llamada por él mismo "La edad de oro". Estas criaturas son una especie de gorilas-monos blancos (me ha hecho pensar en Copito de Nieve) y además encontraremos también unos fantasmas que han ido acumulándose con el paso de los años:

"Si cada generación fenece y deja fantasmas, argumenta él, el mundo al final estará atestado de ellos."

 

En ese mundo futurista encontrará una niña-mujer llamada Weena, a quien salva del río cuando está a punto de ahogarse y que le estará muy agradecida y le acompañará en sus aventuras a partir de ese momento, si bien es un secundario más sin voz en toda la novela, y tan solo hace gestos, llora, ríe...etc.

Nos presentará también varias teorías científicas relacionadas con la evolución, con Darwin, con algunas cuestiones astronómicas (luna, sol...etc) y algunos cambios climáticos que experimenta allí. El hombre, en ese tiempo, está dividido en dos especies diferenciadas: los Eloi (seres superiores) y los Morlocks (seres del subsuelo). Los Eloi tienen miedo a la oscuridad y siempre duermen en grupos, nunca se separan ni se quedan solos, y los morlocks tienen miedo a la luz y viven en el medio subterraneo, en unas cuevas y pasillos hechos bajo el suelo.

"La industria ha perdido gradualmente su derecho de existencia al aire libre."

 También hay una división por clases sociales entre ricos y pobres, y unos no pueden entrar donde habitan los otros: los Eloi son los que viven bien y los morlocks los obreros que trabajan para ellos.

"(...) al final, sobre el suelo habremos de tener a los Poseedores, buscando el placer, el bienestar y la belleza, y debajo del suelo a los No Poseedores; los obreros se adaptan continuamente a las condiciones de su trabajo."

"(...) veía yo una verdadera aristocracia armada de una ciencia perfecta y preparando una lógica conclusión al sistema industrial de hoy día."

Los morlocks son definidos físicamente como poseedores de "rostros lívidos y sin mentón, ojos grandes, sin párpados, de un gris rosado."

El libro logra meterte el miedo en el cuerpo a la vez que también lo está sufriendo el protagonista, huyendo de esos seres tan extraños que viven sobretodo en la oscuridad.

"¿Conocen ustedes esa gran inmovilidad que cae sobre las cosas antes de anocheer? La brisa misma se detiene en los árboles."

La novela viene ilustrada en blanco y negro, dado que la edición que yo he leído es del 1981 y aparecen las ilustraciones de Irene Bordoy. Es la primera edición de la colección "Club Joven" de la editorial Bruguera.

Os dejo con una cita que resume muy bien la temática del libro en su totalidad:

"El hombre se había contentado con vivir fácil y placenteramente a expensas del trabajo de sus hermanos, había tomado la Necesidad como consigna y disculpa, y en la plenitud del tiempo la Necesidad se había vuelto contra él."

Puntuación: